viernes, 4 de abril de 2008

Los tiempos han cambiado

Hoy como la mayoría de las noches, me senté frente a la computadora con ánimos de “conectarme” y hablar con mis amigos de Panamá y Colombia. Claro, luego de revisar mi hi5 porque tenía un nuevo comentario en mi perfil. Todo parecía ser parte de mi rutina diaria hasta que una pequeña lucecita encendió mi cerebro y me ordenó analizar el mundo actual.

Todo empezó porque mientras revisaba mi correo, mi madre se sentó a ver las fotos que mi abuela guardaba en el baúl de los recuerdos. “Los tiempos han cambiado”, me dijo y de pronto recordé que es esa la frase que antepone a una larga letanía de recuerdos. Tu papá, prosiguió, mandaba a celestinos para cuando queríamos vernos y miráte vos, a puros mensajes del celular te ponés de acuerdo con el susodicho para irte a vagar.

Claro que en un principio pensé que tal vez estaba exagerando mucho con eso de los tiempos pasan. Pero luego, analicé que sí, tiene razón: El mundo ha cambiado.
Y es que con el fenómeno de la tan mencionada globalización parece ser que la tecnología ocupa un lugar importante en la vida cotidiana. Esto fácilmente lo podemos observar a diario. Hasta el más pobre de los salvadoreños tiene un celular, ¡y no cualquier celular! Parece ser que quien tiene el mejor celular con cámara, agenda, calculadora, lámpara y reproductor de mp3 es quien más adaptado está en la actualidad. ¡Y qué hablar de los reproductores de música! Todavía recuerdo hace unos cuantos años cómo mi hermano ahorró por mucho tiempo para comprarse un discman.

Todavía tengo mi primer walkman. Aún recuerdo cómo hablaba a las emisoras para grabar las canciones (claro que muchas veces grababa parte de la publicidad del momento), pero no importaba porque tenía la canción que quería. Hoy tener un mp3 es la manera más factible de escuchar la música que a uno le plazca. Más fácil aún es tener la canción que uno quiera (completa y sin publicidad)... en cinco minutos, y ¡listo!

Hace un par de años, mi diversión del momento era ahorrar todos los días para que el fin de semana pudiera ir a un cibercafé a chatear con mis amigos. Brinqué de la felicidad cuando mi hermano se hizo cargo de los gastos y puso el internet en mi casa. Al principio, debo confesarlo, era una enorme emoción el simple hecho de estar en el Messenger. Luego, lo adoré aún más cuando por situaciones especiales no hallaba información en la biblioteca y recurría al internet. Claro que, una de las desventajas que veo de todo ello es el anonimato de la información. En muy pocos casos hay autoría de las notas o páginas. A mi opinión, prefiero mil veces ir a la biblioteca que confiar en lo que hallo en internet.

Hasta este punto mi mente había viajado mucho, pero el sonido de mi celular me devolvió a mi casa. Creo que por más de veinte minutos no escuché lo que mi madre decía. Me enseñó una foto de ella cuando era novia de mi papá y con una sonrisa le dije: “mami, tiene razón. Los tiempos han cambiado”.

Me pregunto cómo será en el futuro…




4 comentarios:

AllxXander dijo...

¡Hola Sary! Pues es verdad, todo ha cambiado. La tecnología se ha metido tanto en nuestras vidas que ya ni siquiera nos damos cuenta de ello.

Ayer, cuando regresaba de la U, en un bus del transporte colectivo, venía viendo "En busca de la felicidad", en un televisor de 12pulgadas que el motorista había instalado en el techo de la unidad. Por supuesto que el televisor tenía DVD y sonido sorround para que me sintiera como en el cine. Al ver todo esto lo primero que me pregunté no fue cómo la tecnología hacía posible todo aquello, sino cuánto ganan estos tipos que tienen para gastar en esto. Es por eso que te digo que los cambios pueden pasar desapercibidos.

Bueno pues es todo lo que tengo que decir por ahora.

Mentí ¡qué lindo escribís! Seguí así. Te cuidás y hablamos un rato por el MSN más tarde.

Mimi de pineda dijo...

Es cierto. Lo más interesante es que no es tanto que haya cambiado, sino que siempre cambia. Por ejemplo, cuando sale un nuevo modelo de celular y lo comprás te topas con que a las tres semanas ya salió otro mejor.

Roxana Martel dijo...

Sary:

Me gustó mucho tu entrada. Como dice Luis, escribís muy bien. Las reflexiones acerca de los cambios y las tecnologías son interesantes. Quizás podrías, en las próximas entradas relacionar algunos otros temas más que ayamos viendo en clase para ver cómo desde ejemplos concretos se pueden ver procesos complejos de comunicación y cultura.

Nos seguiremos leyendo... gracias por el estilo fresco que nos compartes!

Roxana

freedom dijo...

Vaya que me has hecho caer en cuenta de muchas cosas, ese es uun tema que me ha dado muchas vueltas ultimamente... libros, cassettes entre algunas cosas q se pueden mencionar se han desvirtuado con los avances tecnológicos.

Que buena forma de hacernos caer en cuenta de esas cosas... Aunq nos hemos hecho tan dependientes de la tecnología que seguiremos atrapados aqui por un buen rato...